La inspiración viene por olas, y a veces, puede parecer que está completamente fuera de control. A diferencia de la tecnología, no podemos ordenar a nuestra mente para tener grandes ideas o soluciones ideales de un minuto a otro.

La inspiración puede sentirse de muchas maneras. Algunos podemos sentirla como la necesidad espontánea de realizar algo creativo o en ese momento eureka, donde todo lo que creías sin salida comienza a tener solución.

Sentirte inspirado en tu vida diaria puede desempeñar un papel clave para desbloquear la creatividad, aumentar tu productividad y felicidad. Las personas que regularmente se sienten inspiradas en casa o en el trabajo tienden a ser más comprometidas, seguras y motivadas para resolver problemas y crear cosas nuevas.

¿Cómo puedo encontrar inspiración?

Practica la gratitud

Una de las formas más simples y efectivas de encontrar inspiración es practicar la gratitud. Tomar 10 minutos de tu tiempo al comenzar la mañana y centrar tu atención en aquello que haga sentir tu corazón completo puede hacer una gran diferencia.

Sin importar lo pequeño o insignificante, sentir gratitud por el calor del sol en tu cara, los amigos que te rodean o apreciar la belleza de tu entorno harán la diferencia en tu perspectiva y te acunarán desde una luz mucho más positiva.

Cultiva tu curiosidad

La curiosidad es el combustible de la inspiración. Cuando sentimos curiosidad, buscamos respuestas y exploramos el mundo que nos rodea. Cultivar este maravilloso sentido te abrirá panoramas y nuevas experiencias.

Leer nuevos libros, documentales o interactuar con personas de diferentes orígenes y perspectivas te ayudarán a mantener el motor en marcha.

Busca la belleza de lo ordinario

La inspiración puede encontrarse en las cosas más ordinarias. Tomar unos minutos de tu tiempo y observar a conciencia tu entorno te hará sentirte más presente y en calma, encontrando la belleza en lo pequeño.

Mantener tu mente en este espacio te permitirá crear habitación para nuevas grandes ideas.